Perro cuida de niña enferma y ella decide darle una sorpresa especial

Después de muchos estudios, a Bella le diagnosticaron una rara enfermedad llamada "Síndrome de Morquio". Esta hace que su cuerpo no produzca suficientes enzimas, lo que provoca que deje de crecer. Pero las complicaciones de la enfermedad no solo están relacionadas con su tamaño, también provoca enfermedades cardiovasculares y paraplejía, ya que la espina dorsal se vuelve débil.

Bella ha tenido que enfrentarse a 9 operaciones para tratar su enfermedad, a pesar de ello, todavía tiene que andar con muletas o usar silla de ruedas.

Pero la sedentaria vida de Bella cambió cuando su familia descubrió un proyecto en el que se entrena a Gran Daneses para ser asistentes médicos.
Bella y su familia fueron a visitar de inmediato el centro de entrenamiento, donde la niña conoció a George, este gigante perro.
Fue amor a primera vista. Desde entonces George se niega a apartarse del lado de Bella.

Desde que conoció a este flamante perrito, Bella está mucho más contenta e incluso ha podido sustituir una de sus muletas por George. Sin duda, sus vidas cambiaron para bien.
Gracias al apoyo y amor incondicional del perro, la familia de Bella y ella misma, querían hacer algo especial por el perro que ya no se aparta del lado de la niña.

Así que decidieron dedicarle todo un día a George, un día para mimarlo en todos los sentidos. Este día fue organizado por un grupo que se dedica a dar un día especial a perros que se lo merecen. Bella, su madre y George viajaron a Boston, donde se alojaron en un hotel de lujo. Durante el día George pudo visitar la ciudad junto a su familia.

La comida especial no podía faltar. George pudo disfrutar de unas hamburguesas para perritos.

Jugó en la nieve con su humana favorita en una zona reservada solo para ellos dos.

Visitaron una tienda de golosinas para perros, donde a George le dieron a probar diferentes golosinas.

De regreso a la lujosa habitación de hotel, a George le esperaban muchos juguetes con los que pasar el tiempo de forma divertida.

No podía faltar un nuevo lugar para reposar sus patas tras un largo día de diversión; lo suficientemente grande para su tamaño.

Bella y George pasaron algunos de los momentos más felices que pueden recordar. Sin duda, ninguno olvidará este fantástico día.