Se supone que los basureros recogen cosas, es su trabajo. Pero este basurero de Illinois recogió algo totalmente inesperado: un pastelito de cumpleaños de su mayor fan, una niña de 3 años llamada Brooklyn Andracke.
“Cada jueves, me alegra ver lo contenta que se pone Brooklyn cuando nuestro querido basurero toca la bocina y le dedica una GRAN SONRISA,” escribe la madre de Brooklyn en la página de facebook de la ciudad de Bloomington. “Y hoy Brooklyn y yo envolvimos uno de los pastelitos de su cumpleaños y le esperamos. Cuando bajó por nuestra calle, ella corrió a la esquina. Él se paró, se bajó y nos sonrió. Brooklyn se quedó momentáneamente sin habla mientras le daba el pastelito. Yo le expliqué que nos alegraba verle cada jueves, y que apreciamos su atención, así que es un día muy especial para nosotras.”
Comentarios 0